Errores al utilizar el hilo dental

Sabemos que la higiene oral es de vital importancia para mantener un estado de salud óptimo en nuestra boca. Usar el cepillo de dientes, el dentífrico, los enjuagues bucales, el limpiador lingual… ¿Y el hilo dental? Son muchos los pacientes que ya lo utilizan al menos una vez al día para remover toda la placa acumulada y llegar a las zonas difíciles. Los restos de alimentos pueden almacenarse en cualquier parte, y el cepillo eléctrico o manual tiene una capacidad limitada. De hecho, todos los dentistas recomiendan utilizar hilo o seda dental, o bien cepillos interdentales. A pesar de que su uso está cada vez más extendido, aún se cometen errores en el momento de utilizarlo. ¿Cuáles son los más frecuentes?

Usar correctamente el hilo dental

1. No utilizar una técnica adecuada: el modo de emplearlo es fundamental para que el hilo dental sea realmente el útil. El paciente debe tomar unos 40 cm de hilo y enrollar buena parte del mismo alrededor de los dedos medios de ambas manos, dejando entremedio de 3 a 5 cm de hilo. Esta pequeña franja será la que utilizaremos para trabajar. Una vez preparado el utensilio, es preciso sostener el hilo con fuerza y guiarlo entre los dientes con un movimiento delicado. Tiene que llegar desde la punta del diente hasta la encía y, cuando alcance este punto, tienes que curvar el hilo en forma de C e introducirlo unos milímetros por debajo del tejido gingival. Haciendo movimientos hacia los dos lados podremos eliminar la placa bacteriana de manera eficaz. Este procedimiento se repite igual en todos los espacios interdentales y debemos enjuagar la boca al final.
2. Forzar el paso del hilo dental: sabemos que es recomendable utilizar el hilo dental, pero también que forzar su paso entre los dientes puede causar daños en la encía. Recordamos que no se ha de utilizar de forma agresiva, sino suavemente y realizando movimientos en zigzag.

¿Y con los cepillos interdentales?

La alternativa a la seda o hilo dental son los cepillos interdentales, preferibles por algunos pacientes. Como en el caso anterior, también se cometen errores al utilizarlos:

1. Forzar su uso: al igual que el hilo dental, es importante utilizar estos cepillos especiales sólo cuando sea posible.
2. No tiene el tamaño adecuado: el cepillo interdental debe pasar justo amoldándose al espacio entre los dientes. No debe ser ni muy holgado, ni demasiado grueso.

Autor

Autor del texto: Dr Dario Vieira Pereira

Licenciado en odontología. Se ha especializado con el Máster en Cirugía e implantología por la Universidad de Barcelona, y completó su formación con el Diploma de Estudios Avanzados en la Facultad de Odontología de la misma Universidad. Licenciado en Odontologia 1996-2001 Master de cirugía bucal e implantología bucofacial, Facultad de odontología, Universidad de Barcelona 2001-2004 Diploma de estudios avanzados del Doctorado con clasificación de excelente 2006.