La prótesis fija es un tratamiento diseñado para recuperar los dientes perdidos del paciente y contribuir a aumentar la funcionalidad y la estética de su boca. Pueden ser implantosoportadas (se adhieren a los maxilares mediante implantes dentales) o bien cementadas, es decir, se insertan a dientes naturales previamente desgastados, a los que cubre o enfundan. Ambas fórmulas consiguen restaurar, entonces, las partes deterioradas de los dientes (con fundas o coronas) y reponer algunos ausentes. Aunque la prótesis fija implantosoportada es preferible para muchos pacientes y recomendad por numerosos dentistas, la prótesis fija dentosoportada es una de las más cómodas, mejor toleradas y de las que menos problemas producen, pero no siempre es posible colocarla.
¿Qué limitaciones tiene la prótesis fija dentosoportada? La verdad es que tiene pocas contraindicaciones. Proporciona una buena masticación, un habla y una estética adecuadas y tiene una gran ventaja: el paciente no tiene que retirarla de la boca para limpiarla. No obstante, es cierto que, en determinadas ocasiones, el tratamiento puede no ser de suficiente agrado: no permite cerrar los espacios entre los dientes si han menguado las encías. En estos pequeños huecos se acumula saliva y aire, produciendo, en algunos casos, un leve “ceceo”. ¿Otra desventaja? Exige más cuidados en casa y una vigilancia más frecuente por parte del dentista. Pero, a pesar de estas insignificantes contradicciones, esta segunda tipología de prótesis fija es aún muy solicitada.
Hemos dicho que la prótesis fija dentosoportada exige un esfuerzo notable por parte del paciente en limpieza y cuidados. Es necesario ser extremadamente cuidadoso y evitar, por ejemplo, los alimentos muy duros (como frutos secos con cáscara) o morder objetos. La higiene de la boca y la prótesis debe hacerse inmediatamente después de cada comida y, sobre todo, en profundidad antes de meterse en la cama. Así evitaremos el desarrollo de enfermedades comunes como la caries dental y la enfermedad de las encías. ¿Qué más aspectos cabe tener en cuenta?
Durante los primeros días, es posible que, como en todo tratamiento de restauración, el paciente se sienta extraño: adaptarse a la prótesis fija lleva un tiempo. Durante los primeros días, es posible que notes cómo un cuerpo extraño se ha apoderado de tu cavidad oral. Pero no te preocupes, las malas sensaciones se desvanecen rápido. Sigue nuestras recomendaciones para acelerar el proceso:
Además de todo lo expuesto hasta ahora, como paciente debes recordar que el profesional debe revistar la prótesis fija una vez cada seis meses, así como el estado de tu boca en general. Si cumples con el calendario, es más fácil detectar problemas y enfermedades de forma precoz: caries dental, inflamación de las encías, movilidad dentaria, posibles descementaciones, ulceras…. Y revisar el estado y el ajuste de los aparatos. Por otro lado, no dudes en contactar con Clínicas Propdental si detectas alguna anomalía; estamos a tu disposición las 24 horas del día.
Autor del texto: Dr Dario Vieira Pereira
Licenciado en odontología. Se ha especializado con el Máster en Cirugía e implantología por la Universidad de Barcelona, y completó su formación con el Diploma de Estudios Avanzados en la Facultad de Odontología de la misma Universidad. Licenciado en Odontologia 1996-2001 Master de cirugía bucal e implantología bucofacial, Facultad de odontología, Universidad de Barcelona 2001-2004 Diploma de estudios avanzados del Doctorado con clasificación de excelente 2006.