¿Sabías que limpiar los dientes cada día es insuficiente? Para conseguir una sonrisa sana, es importante limpiar otras zonas como la lengua. Pero, ¿Cómo realizar una correcta limpieza lingual?
Si bien el cepillado es el primer paso en la rutina de higiene bucodental, no es el único. Los filamentos del cepillo no consiguen llegar con eficacia a los espacios más difíciles de la cavidad oral: espacios interdentales, la línea de las encías… Y también la lengua. A menudo sólo nos preocupamos por la lengua cuando conlleva problemas: manchas blancas, dolor…
Una limpieza lingual diaria es la clave para evitar estas complicaciones y prevenir patologías como la halitosis. Según un estudio, hasta el 41% de casos de mal aliento tienen origen lingual. Los restos de bacterias y biofilm oral se acumulan en lo que llamamos cubrimiento lingual, la superficie de la lengua. Esta capa se forma de diferentes tipos de nutrientes y bacterias relacionadas el mal aliento.
Se calcula que en la lengua hay centenares de bacterias distintas. Si notas que tu lengua tiene una capa blanquecina o amarillenta, es señal de que no está limpia. Una lengua sana y limpia tiene un aspecto rosado. Estos son algunos pasos para mantener la lengua sana:
Otras técnicas de higiene oral que sirven para tener una lengua sana son el enjuague bucal y la irrigación bucal. El colutorio suele incorporar flúor, que además remineraliza el esmalte. La limpieza lingual será el complemento estrella para lucir una sonrisa más sana y un aliento fresco.
Autor del texto: Dr Dario Vieira Pereira
Licenciado en odontología. Se ha especializado con el Máster en Cirugía e implantología por la Universidad de Barcelona, y completó su formación con el Diploma de Estudios Avanzados en la Facultad de Odontología de la misma Universidad. Licenciado en Odontologia 1996-2001 Master de cirugía bucal e implantología bucofacial, Facultad de odontología, Universidad de Barcelona 2001-2004 Diploma de estudios avanzados del Doctorado con clasificación de excelente 2006.