El periodonto está compuesto por los tejidos que rodean al diente en el proceso alveolar mandibular y maxilar. La única porción que nosotros podemos ver es el epitelio gingival, que, cuando está sana, por norma será de color rosa.
La encía puede ser diferenciada de la mucosa de la cara vestibular de los dientes superiores y de los dientes de la mandíbula por la llamada línea mucogingival o unión. En las zonas donde encontramos contacto entre dientes adyacentes, al encía tiene un perfil típico de un punto triangular en la zona interproximal.
En determinados diagramas, el diente y el hueso circuncidante, se puede discernir una delgada capa de tejido mineralizado que se conoce como cemento. Las fibras del ligamento periodontal deben ser insertadas en el cemento en el diente y en el hueso alveolar en el lado opuesto, por lo que se puede decir que el ligamento periodontal es el mecanismo principal en cuanto al anclaje del diente al hueso maxilar. El espacio en este ligamento también ofrece nutrientes a la superficie del hueso alveolar mediante el riego sanguíneo. Las estructuras circuncidantes también ofrecen funciones sensoriales y regenerativas.
El riesgo de sangre para el periodonto viene derivado de las arterias alveolares superiores e inferiores. Ciertas ramas de la fuente de la sangre van directamente al ligamento periodontal y al hueso alveolar. Otras ramas se extienden a lo largo de la superficie del hueso. En caso de que se requiera una técnica quirúrgica en la encía, la extensa circulación colateral puede ayudar al dentista en la clínica a fin de realizar estos tratamientos dentales sin que se comprometa el riego de sangre.
La inserción periodontal y los tejidos de soporte empiezan en las primeras etapas del desarrollo de los dientes, por norma general entre la cuarta y la quinta semana de gestación. El tejido conjuntivo gingival de la corona a la zona del ligamento periodontal se llama el área reticular del tejido conjuntivo gingival.
Esta área comparte ciertas características estructurales con el ligamento periodontal. Este se compone de una red de diversas fibras de colágeno. Estas fibras cuentan con diferentes orientaciones que salen desde la cresta alveolar en la encía, desde la superficie del diente y mediante el periostio bucal.
Ciertas fibras también siguen un patrón circular alrededor del diente, así como mediante la cresta alveolar y en la superficie de la raíz de la pieza dental adyacente.
Autor del texto: Dr Dario Vieira Pereira
Licenciado en odontología. Se ha especializado con el Máster en Cirugía e implantología por la Universidad de Barcelona, y completó su formación con el Diploma de Estudios Avanzados en la Facultad de Odontología de la misma Universidad. Licenciado en Odontologia 1996-2001 Master de cirugía bucal e implantología bucofacial, Facultad de odontología, Universidad de Barcelona 2001-2004 Diploma de estudios avanzados del Doctorado con clasificación de excelente 2006.