El tratamiento dental en pacientes que necesitan someterse a quimioterapia depende de la fase en la cual se encuentre el tratamiento tumoral.
Los pacientes que necesitan someterse a tratamiento de quimioterapia padecen una alta suceptibilidad a las infecciones, a menudo con un origen oral, en forma de mucositis, ulceración, tendencias hemorrágicas y retraso en la cicatrización.
Debido a que los microorganismos orales son fuente frecuente de bacteriemias, su eliminación de la boca antes de la quimioterapia, puede reducir la frecuencia de las septicemias y por tanto disminuir la morbilidad y mortalidad.
Antes del tratamiento dental el paciente en tratamiento de quimioterapia debe de ser sometido a una completa exploración clínica y radiográfica, haciendo particular énfasis en aquellos lugares orales que pensemos puedan producir problemas durante la quimioterapia:
Antes de la quimioterapia, el dentista debe realizar las extraciones pertinentes, el tratamiento periodontal que proceda.
Hay que hacer reflexionar al paciente sobre la necesidad de mantener una correcta higiene oral y enseñarle a realizarla.
Las extracciones y otros procedimientos quirúrgicos están indicados realizarlos antes, debido a que la quimioterapia produce tendencias hemorrágicas y susceptibilidad a la infección por la afectación tóxica medular.
El tratamiento dental durante de la quimioterapia, cuando se presenta una emergencia dental y existen severas alteraciones hematológicas, la realización de una transfusión sanguínea junto a la cobertura antibiótico, deben de ser consideradas antes del tratamiento dental.
La intervención del dentista con tratamientos de odontología debe de ser mínima y paliativa o bien definitiva en relación al problema dental.
Es posible evitar o reducir las ulceraciones orales producidas por el metrotexate, usando en forma sistèmica o tópica el ácido fótico.
Cuando se ha establecido la mucositis o las ulceraciones orales es imprescindible el mantener una buena higiene oral con enjuagues de clorhexidina al 0,2%, 2 veces al dia.
Algunos pacientes desarrollan candidiasis oral, implicando generalmente una candidiasis esofágica que puede ser una puerta para la diseminación hematógena. La nistatina en suspensión en forma de enjuagues puede ser administrada en forma profiláctica antifungica.
La dentaduras de quita y pon deben de ser limpiadas cuidadosamente y puestas durante la noche en una disolución al 1% de hipoclorito, para intentar disminuir la cantidad de candidiasis acantonada en la prótesis.
Las infecciones herpéticas orales deben ser tratadas con aciclovir en suspensión o en forma sistèmica, via oral o intravenosa.
En forma profiláctica se pueden utilizar también, ante de que aparezca el herpes. Ante infecciones microbianas, si sospechamos la presencia de bacterias Gram negativas, se debe usar gentamicina o carbenicilina.
La aspirina puede aumentar los efectos terapéuticos del metrotexate.
El tratamiento dental después de la quimioterapia definitivo debe de realizarse entre los ciclos quimioterápicos, (si no se realizó al completo antes de la quimioterapia).
Se debe de prestar especial atención a la higiene y prevención oral.
Hay que recordar que el paciente es probable que tenga anemia, tendencias hemorrágicas y susceptibilidad a la infección.
Autor del texto: Dr Dario Vieira Pereira
Licenciado en odontología. Se ha especializado con el Máster en Cirugía e implantología por la Universidad de Barcelona, y completó su formación con el Diploma de Estudios Avanzados en la Facultad de Odontología de la misma Universidad. Licenciado en Odontologia 1996-2001 Master de cirugía bucal e implantología bucofacial, Facultad de odontología, Universidad de Barcelona 2001-2004 Diploma de estudios avanzados del Doctorado con clasificación de excelente 2006.